El confinamiento provocado por la pandemia de COVID-19 y las medidas adoptadas para hacerle frente forzó el trabajo a distancia. Tanto las organizaciones que ya contaban con políticas de teletrabajo como aquellas que no las tenían tuvieron que adaptarse a una situación sin precedentes que ha cambiado la manera de trabajar.
El pasado 10 de julio de 2021 el BOE publicaba la Ley 10/2021 de trabajo a distancia. Analizamos las principales medidas que recoge esta ley para que empresas y trabajadores conozcan sus derechos y obligaciones.
Diferencias entre el teletrabajo y el trabajo a distancia
La Ley define el trabajo a distancia como una forma de organización del trabajo donde la actividad laboral se presta en el domicilio de la persona trabajadora o en el lugar elegido por esta, durante toda su jornada o parte de ella, con carácter regular.
Mientras que el teletrabajo se entiende como un tipo de trabajo a distancia, en este caso que se lleva a cabo mediante el uso exclusivo o prevalente de medios y sistemas informáticos, telemáticos y de telecomunicación.
Si bien la Ley se refiere siempre al término trabajo a distancia, entendemos que el teletrabajo tal y como lo conocemos también aplica, pues sería un tipo de trabajo a distancia.
El acuerdo del trabajo a distancia
La Ley del trabajo a distancia no establece la obligatoriedad del teletrabajo como modalidad de empleo. De hecho, se indica que para poder teletrabajar debe existir la voluntad, tanto del empresario/a como del trabajador/a, de realizarlo.
Para poder implementar el teletrabajo es necesario que ambas partes recojan el acuerdo por escrito, el cual debe ser remitido a la oficina de empleo nacional, en este caso al SEPE. Este acuerdo es de carácter individual, es decir que por cada teletrabajador deberá firmar su propio acuerdo con su empresa.
¿Qué debe incluir un acuerdo de teletrabajo?
Se establece que el acuerdo del trabajo a distancia debe contener un mínimo de puntos detallados:
- Se debe reflejar el horario de trabajo, el porcentaje entre trabajo presencial y el desarrollo del trabajo a distancia
- Gastos y forma de compensación de los mismos
- Medios y equipos necesarios para el desarrollo de las funciones del trabajador (consumibles y otros)
- Asimismo, se deberá concretar el lugar donde se va a realizar el trabajo a distancia y presencial y la duración del acuerdo.
¿Quién puede acogerse a la Ley del Teletrabajo?
La ley de teletrabajo aplica para todas aquellas personas asalariadas que teletrabajan por un tiempo igual o superior al 30% de su jornada total durante un periodo de tiempo de 3 meses. En el caso de contratos de formación, prácticas o personas menores de edad se obliga a realizar, como mínimo, un 50% de la jornada laboral de forma presencial.
¿Cuáles son las limitaciones en el trabajo a distancia?
Se deben aplicar medidas que garanticen la conciliación y el derecho a la desconexión. Además la empresa debe velar por los derechos sociolaborales de los trabajadores/as contra la discriminación y acoso laboral; sin modificar las condiciones en materia de retribución, tiempo de trabajo, promoción o formación profesional.
¿Qué gastos debe afrontar la empresa por el trabajo a distancia?
La empresa debe proporcionar los medios que necesita el trabajador/a para prestar su servicio, y compensar los gastos directos e indirectos ocasionados por el trabajo a distancia. Se especifica que los gastos indirectos incluyen la parte proporcional de los gastos de uso y consumo en que incurriera la persona trabajadora o de cualquier otro que pudiera tener como consecuencia del trabajo y se llama a la negociación colectiva o convenio colectivo para establecer mecanismos de compensación que garanticen la total compensación de todos los gastos. Un ejemplo de estos gastos podrían ser el wifi o la energía eléctrica.
¿Pueden las empresas controlar a los trabajadores?
La Ley del trabajo a distancia recoge la posibilidad de que las empresas puedan instalar dispositivos que sirvan para rastrear el cumplimiento de las tareas de los/as trabajadores/as. A pesar de que la normativa no concreta la forma y mecanismos permitidos, la Ley deja claras sus intenciones de proteger los aspectos privados de la vida del teletrabajador.
Más info en Ley 10/2021, de 9 de julio, de trabajo a distancia.